Dejaba atrás la ciudad de la mano de su sonrisa, solamente hicieron falta veinte segundos de coraje y unos pocos minutos de valor, y supiste hacer que aquella noche me sobraran los motivos, las ganas, y unas cuantas copas de alcohol. Y entre una canción de Pereza entre mis piernas que te exigía que me llevases al baile, me llevas a ese sitio en el que dicen que la luna se fuma las estrellas.
Yo dentro del baúl de las indecisiones, las tardes tristes y echando de menos eso de que ``descalzos nuestros pies siempre se llevaron bien´´ sintiendolo hondo, en el fondo, donde solo él supo llegar .
Un día de los tristes donde se digan, de los que te hacen romper a llover. Donde dicen que el otoño ya se ha ido pero que para mí parece que llega junto con una canción que intenta hacer el día aún más corto.
Un día que te diría que pese a que la virtúd siempre se convierte en defecto yo aún lo estoy grabando.
Del diecisiete primero A, de ir todo recto y ver como lo estoy intentando.
Que él se ha dejado seducir por unas caderas bonitas, por una mirada que no encuentra, por un misero roce de labios de quienes creen que se puede viajar a lo ya vivido.
Yo dentro del baúl de las indecisiones, las tardes tristes y echando de menos eso de que ``descalzos nuestros pies siempre se llevaron bien´´ sintiendolo hondo, en el fondo, donde solo él supo llegar .
Un día de los tristes donde se digan, de los que te hacen romper a llover. Donde dicen que el otoño ya se ha ido pero que para mí parece que llega junto con una canción que intenta hacer el día aún más corto.
Un día que te diría que pese a que la virtúd siempre se convierte en defecto yo aún lo estoy grabando.
Del diecisiete primero A, de ir todo recto y ver como lo estoy intentando.
Que él se ha dejado seducir por unas caderas bonitas, por una mirada que no encuentra, por un misero roce de labios de quienes creen que se puede viajar a lo ya vivido.
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